El Evangelio de Mateo (14: 26-33) nos enseña que la fe en Cristo, incluso cuando las cosas parecen imposibles o sin esperanza, puede conducir a una confianza más profunda. Fue la falta de fe de Pedro lo que le impidió caminar sobre el agua, y fue Jesús quien lo rescató.
Sin lugar a dudas, debido al coronavirus, estamos viviendo circunstancias inusuales. La vida y la salud de las personas se han visto afectadas directamente, y muchos de nosotros estamos sintiendo los efectos de la pandemia de otras maneras, ya sea la preocupación por la economía o por algo tan común como ir de compras.
En las últimas semanas, y especialmente en los últimos días, nos hemos enfrentado a más preguntas que respuestas.
Para ayudar a responder a algo de esto, recientemente emití un decreto formal para nuestros sacerdotes y diáconos que detalla las acciones específicas que se implementarán en todas las Misas durante la pandemia de coronavirus. Todos estos mandatos han sido formulados después de mucha oración y reflexión, y todos siguen las leyes canónicas a cabalidad.
En este momento, la Diócesis Católica Romana de Knoxville no tiene planes de cancelar las Misas sagradas en ninguna de sus 51 parroquias e iglesias misión, incluida la Catedral del Sagrado Corazón de Jesús. He ofrecido dispensaciones especiales para aquellos que no pueden asistir a Misa. Todo esto se explica en el decreto adjunto, que les animo a leer.
Además, les pido a nuestros párrocos y sacerdotes que usen la prudencia al programar o decidir cancelar eventos parroquiales no sacramentales como clases o cenas cuaresmales de pescado frito.
Finalmente, para aquellos que no pueden asistir a las Misas, nuestra diócesis y la Catedral del Sagrado Corazón de Jesús ofrecerán las transmisiones de las celebraciones de la Misa del sábado y domingo en nuestros sitios web, dioknox.org y shcathedral.org.
A lo largo de la historia, la Iglesia Católica se ha mantenido firme y ha sido un refugio para el mundo cuando enfrentamos luchas. Durante este tiempo de incertidumbre, les pido que recen por la Intercesión de María, y también con la oración de Memorare.
También oro para que encuentren paz y consuelo en sus vidas y que recuerden la esperanza que Cristo nos trae con su promesa de salvación, especialmente cuando los tiempos son inciertos.